La decisión drástica del Real Madrid, liderada por Pablo Laso, de apartar de la dinámica del primer equipo a Thomas Heurtel y Trey Thompkins supone un antes y un después en la gestión de plantilla del equipo madridista. Ambos jugadores no volverán a vestir la camiseta merengue, como confirmó el técnico este viernes, y abandonarán el equipo al término de la presente temporada. La suerte para el Madrid, dentro de la desgracia de vese obligados a descartar a dos de sus jugadores en el tramo clave de campaña, reside en que ambas son salidas asequibles y dirán adiós sin mayores dificultades cuando suene la bocina de final del curso.
En el caso de Thompkins, la llegada del fin de su contrato, con fecha 30 de junio, llegaba de la mano de un casi seguro fin de ciclo en la entidad en la que se mantiene desde 2015. Ídolo en la Euroliga conquistada en Belgrado en 2018 y uno de los más queridos por la afición, su capacidad de tiro y, en general, en la ofensiva, dista de la profesionalidad que ha mantenido en varias etapas de su trayectoria como madridista, en las que el club ha tenido un trato especial con él, concediéndole incluso tiempo extra para hacer la pretemporada y ponerse en forma, algo que no había hecho en verano.
Su salida, repetimos, se daba por hecha salvo giro de los acontecimientos y en Europa ya había equipos interesados en hacerse con el fichaje del norteamericano de 32 años. Veterano, sin contrato en vigor ni pasaporte comunitario, con problemas para ponerse en forma y con un ciclo agotado en el club, su salida no resultará problemática ni hará al Real Madrid pagar un euro más de la cuenta por un ‘4’ que logra un hueco en la historia reciente del club, pero al que su falta de profesionalidad ha acabado, tras varios avisos, por jugarle una mala pasada en forma de borrón en su final.
Heurtel, adiós por 100.000
Thomas Heurtel, que llegó al Madrid con la vitola de fichaje motivador, debido a su abrupta salida del Barcelona meses atrás, ha dejado luces y sombras dentro del bajo rendimiento de los bases madridistas en la temporada 2021-22 y, al contrario que su compañero Williams-Goss, no ha logrado ser todo lo profesional que requería la situación. Por ello, Laso toma la decisión de apartar a otro veterano, en su caso fichaje nuevo y cuyas cualidades resultaban idílicas para el puesto de base suplente. Sin embargo, Heurtel no dio el paso adelante que se requería y sí colocó su comportamiento en la otra dirección, lo que le vale la condición de apartado antes de cumplirse un año de su llegada.
El internacional francés no jugará más con el Real Madrid, aunque tiene contrato hasta el 30 de junio de 2023. Sin embargo, el segundo año firmado el pasado verano estaba sujeto a una cláusula que romperá el club por una cantidad de alrededor de 100.000 euros, mínima si tenemos en cuenta que Laso le ha puesto la cruz y que no volverá a contar con él mientras sea entrenador. Los blancos pagarán y saldrán al mercado en busca de un base que, por fin, logre aunar el rendimiento deportivo y extradeportivo necesarios para liderar a la sección.
